unparrafoaldia.wordpress.com
Los padres y el misterio de la muerte
Quiebra ese aire un hombre joven, acercándose al viejo: -¡Por fin, padre! Vámonos. Siento haberle tenido esperando, pero ese director… El viejo le mira: «¡Pobre chico! Siempre con prisa, siem…